De aplicación en vehículos de gasolina y diésel con y sin filtro de partículas diésel.
Aceite antifricción moderno de la mejor calidad para motores de gasolina y diésel con y sin filtro de partículas diésel (DPF) y sobrealimentación por turbocompresor. La combinación de aceites básicos no convencionales según la tecnología sintética y los últimos aditivos garantiza un aceite del motor que protege de forma excelente contra el desgaste, disminuye el consumo de combustible y de aceite y proporciona una rápida lubricación del motor. Así, en función de las prescripciones del fabricante se pueden alcanzar intervalos de cambio de aceite de hasta 40.000 km.